Mis allegados y los que leen esto con asiduidad saben que mi casa está en obra desde febrero de 2004. No porque estemos haciendo un condominio de edificios barrocos (¿?) en el terreno, sino más bien porque muchos trabajadores de la construcción o no quieren trabajar, o cobran por día y enlentecen todo, etc.
A raíz de encontrar un grupo de gente que trabaje como la gente, valga la redundancia, he(mos) tenido que lidiar con todo tipo de gente: los que venían con radio y ponían cumbia a todo lo que dá, como si estuvieran en una obra en donde no vive nadie, los que se ponían a romper una pared a las 8 am, o a la hora de la siesta e inclusive los sábados! cuando en otros horarios hacían su trabajo más silencioso, uno que cantaba y chiflaba todo el día, que era muy limpio y prolijo pero carero y lento, los que dejan el baño del fondo hecha un asco, los que dejan la ropa tirada, etc...
Casi nada me molesta TANTO (o sea, me molesta pero no me enerva), creo que hasta aprendí a dormir con golpes a la pared, pero lo que no puedo tolerar, me saca de quicio, me enerva, me pone loca es uno que hay ahora que NO SALUDA. No saluda! Le decís hola y el chabón no se inmuta!
Y, digamos, no es por discriminar, pero no tiene pinta de "bolita mudo que apenas sabe poner un ladrillo arriba del otro", sino más bien es un nenito, debe tener unos 17 años, con claritos en el pelo y cara de ir a Pinar o a Jesse James más que a la bailanta (bueno los de Pinar tienen todos claritos) así que lo único que tiene este nene es mala educación y falta de respeto.
Hasta hace un rato pensé que podía llegar a ser mudo, porque no habla con sus compañeros siquiera, pero ahora están afuera comiendo y lo estoy escuchando. No tiene ningún problema en la voz como para no poder saludar.
Si llegaron hasta acá, gracias por leer.
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