Pablito.

El sábado pasado tuvimos una fiesta. Un cumpleaños de un hijo de una amiga de mi viejo. Un cumpleaños que me hizo anteponer (porque lo pasé para el viernes) los planes importantísimos que tenía para ese sábado.
Estábamos invitados los tres, pero sólo fuimos mi hermano Hernán y yo.
Después de un viaje con hambre, llegamos, era en Coghlan. Y claro, los Guerra queremos llegar y ser glamorosamente recibidos. Esperábamos un "miren quienes llegaron!!"
Pero no.
Porque Dios quiso que "Pablito" llegara 10 segundos antes que nosotros.
Y parece que Pablito no lo veían hacía más que a nosotros.

Sabes quien es este?? Decían los padres del cumpleañero: "Pablito!!" "como creciste Pablito!!" "Pasa Pablito..!!"
Y los hijos de Guerra ahí atrás, paraditos.

Hasta que nos vieron: "Hola, che!" "Cómo andan?" "Ay, Mariana estás igual a tu mam... Pablitoooooooo pasá al quinchoooooooo..!!!"

Y lo dijo mi hermano, en mi oído:

"Pablito y la re concha de tu madre"


Después me dió pena, porque Pablito no conocía a nadie (como nosotros, pero nosotros eramos 2) y se quedó colgado toda la fiesta.

Vení, Pablito, hacete amigo.